La Casa la humita y del Tamal Lojano

Óscar Leiva es lojano, tiene 45 años y es un emprendedor gastronómico. Vive en Quito y ahí se decidió a poner su negocio. Antes de eso tuvo que trabajar de muchas cosas, guardia, lavador de carros, etc.

¿Qué debes saber?

  • La atención es de lunes a domingo, los lunes a sábado de 8:00 a 21:00 y los domingos de 09:00 a 18:00. 
  • Está ubicado su emprendimiento en Selva Alegre y Gualberto Arcos esquina. También tienen servicio a domicilio.
  • Los productos no son lo único importante, sino sobretodo los clientes, para eso está constantemente monitoreando el bienestar de los clientes.
  • Nos garantiza una buena sazón, un gran trato, además tiene un seguro en caso de accidentes para los clientes, es un sitio seguro. 
  • Sus productos son:

    • Humitas de varios estilos
    • Tamales
    • Bolones
    • Quimbolitos
    • Quimbolitos mixtos
    • Empanadas de queso
    • Empanadas de morocho
    • Empanadas de viento
    • Repe
    • Arvejas con guineo
    • Otros platos típicos

Recuerda claramente que un domingo a las 11 y media de la mañana, hace 25 años, dejó el trabajo que tenía en ese tiempo y se dedicó a emprender.

Decidió ponerse a hacer humitas, fue al mercado, compró los insumos y desde ahí inició su emprendimiento. Fue muy duro al inicio, pero persistió, nunca se dio por vencido, se tuvo fe y salió adelante.

Al inicio hizo 30 humitas, vendió apenas 15, las otras las regaló para que la gente conociera su producto. Así pasaron varios días. Las humitas de sal le salían de dulce y viceversa, hasta que su madre y su perseverancia lograron la sazón de ahora.

Hubo tiempos en los que ya decaía y “botaba la toalla”, pero a pesar de las circunstancias persistió y triunfó.

Para Óscar la gastronomía es lo más bonito que hay en el Ecuador, porque sabe apreciar los insumos que tenemos acá. Él disfruta y se apasiona de su trabajo. Cada humita es hecha con dedicación, con cariño.

Su madre le enseñó muchas cosas de la gastronomía, pero sobretodo, le enseñó a perder la vergüenza, y cuando uno pierde la vergüenza puede ganar y ganar. Esa enseñanza ha sido una de las más valiosas y la que siempre lleva con él.

Óscar trabajaba desde la 1 o 2 de la mañana hasta las 10 pm. Para poder salir adelante y triunfar. Considera que el sacrificio es la base del éxito. 

Recuerda que a los 14 años se fue al Oriente a trabajar en los cultivos de Palma, pero su madre quería hacerlo regresar para que terminara la secundaria.

Él quería ayudar a su madre para la crianza de sus hermanos y se sacrificó, lo hizo. Cuando llegó a Quito un tío le dio posada y trabajo, así empezó a conocer el mundo, a forjarse.

Para Óscar la teoría y la práctica son importantes, pero, la actitud es indispensable. 

La gastronomía debe hacerse conocer, debe ser más difundida, tanto para grandes, pero también para pequeños emprendedores. Es el motor de la economía y el progreso e identidad de los pueblos.

Óscar genera empleos, da un gran producto, trata de manera excelente a sus clientes, eso ya es un cambio positivo y un ejemplo. Actualmente en un local da empleo a 80 personas y en el otro a 40 personas. Son 120 familias




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