Café Águila de Oro

El Café Águila de Oro, arraigado en el Centro Histórico de Quito desde 1948, ofrece una experiencia única con café artesanal tostado en una antigua máquina austriaca. Su legado de calidad y tradición perdura.

¿Qué debes saber?

  • Esta tienda artesanal vende el mejor café del Ecuador desde 1940. Si bien no es una cafetería, brinda una maravillosa experiencia gastrónomica que gira entorno al proceso de preparación de los pedidos de café que realizan los quiteños.
  • Para esto mantienen intactas las herramientas, pasos y rituales que se requieren para tostar y moler los granos, tareas que las hacen en vivo en directo para el deleite de los gourmets que llegan al Centro Histórico de Quito en busca de los sabores más tradicionales de la Carita de Dios.
    • La tienda vende café de variedad arábiga, obtenida de la provincia de Loja, específicamente de los sectores de Puyango, Álamo, Chaguarpamba, Quilanga, entre otros.
    • El café tiene una producción totalmente artesanal y todo el proceso es apreciado por clientes que reaccionan con melancolía ante la antigüedad de las máquinas.
    • Sus clientes prefieren un café artesanal debido a que el sabor es más puro respecto un café en tinta o soluble, esta concentración de aroma y sabor a posicionado al café oscuro como la variedad más vendida en el Café Águila de Oro.
    • Ahora si lo que buscas es saborear un exquisito cafe quiteño, en el Centro Histórico hay más de una cafeteria.
    • La tienda artesanal está ubicada en la calle Benalcázar y Espejo. La estación de San Francisco del Metro de Quito, se encuentra a 100 metros de este local tradicional, que sin duda forma parte de la lista de los lugares turísticos de Quito
    • Atiende de lunes a viernes de 8h00 a 16h00 y los sábados de 8h00 a 14h00.

Café Águila de Oro: Donde el Tiempo se Detiene

Ubicado en el pintoresco Centro Histórico de la Ciudad de Quito, el Café Águila de Oro ofrece una experiencia única que transporta a sus visitantes a la década de 1940. Fundada en 1948 por la familia del coronel Luis Alfredo Almeida, esta emblemática cafetería ha sido un punto de referencia en la ciudad durante décadas.

Mauricio Morales, el actual administrador, comparte con orgullo la rica historia del lugar, que ha sido cuidadosamente preservada a lo largo de los años. Desde su fundación, el Café Águila de Oro ha sido conocido por su compromiso con la calidad y la tradición. Vinicio Morales, quien adquirió el negocio en 2005, continúa el legado familiar, manteniendo los mismos estándares de excelencia que lo han caracterizado durante generaciones.

Lo que distingue a este café es su enfoque en la artesanía del café. Utilizando granos de variedad arábiga provenientes de las mejores regiones cafetaleras de la provincia de Loja, el Café Águila de Oro ofrece una experiencia sensorial incomparable. Los granos son cuidadosamente seleccionados y tostados en una antiquísima tostadora austriaca, que ha sido parte integral del proceso desde hace más de 70 años.

El proceso de tostado es todo un ritual, con tres grados diferentes disponibles para satisfacer los gustos más exigentes. Desde un tueste fuerte para un café expreso hasta un tueste más suave para aquellos que prefieren un sabor más delicado, cada detalle se cuida con esmero para garantizar una experiencia de café perfecta.

Los clientes pueden disfrutar de la frescura del café recién tostado y molerlo según sus preferencias en un molino también centenario. La atmósfera nostálgica del lugar, con su decoración vintage y su histórica máquina registradora, añade un encanto adicional a la experiencia.

Pero lo que realmente distingue al Café Águila de Oro es su compromiso con la calidad y la autenticidad. Los clientes elogian no solo el excepcional sabor del café, sino también la atención al detalle y el servicio amable que reciben en cada visita. Para muchos, este café es mucho más que una simple cafetería; es un símbolo de la rica tradición cafetalera de Ecuador y un recordatorio de tiempos pasados.

En resumen, el Café Águila de Oro es un tesoro escondido en el corazón de Quito, donde el tiempo se detiene y cada taza de café cuenta una historia. Ya sea que seas un amante del café o simplemente estés buscando una experiencia única en la ciudad, este encantador café no te decepcionará. Sumérgete en la atmósfera única de este lugar histórico y disfruta de una taza de café que nunca olvidarás.

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