Guayaquil la perla es arte puro

¿Qué debes saber?

• El período más oscuro que vivió esta ciudad es un ingrato recuerdo, que ha servido para catapultarse a un nivel donde todo se ve y se vive con más claridad, con más orden y con una apuesta al arte que, desde hace mucho, ha dado resultado y belleza.
• Lo interesante es que, siendo el epicentro del comercio de Ecuador, esta urbe también ha podido dar lugar al arte y la cultura, con un crecímíento en propuestas y espacios que superan, ampliamen-te, a otras ciudades del país.
• La movida cultural guayaquileria es reconocida, respetada y, sobre todo, cosmopolita.
• Hay una vísíón integral de las artes y de su aporte a la economía; una aprecíacíón que ha logrado —incluso con retrasos y tropiezos— sobreponerse a la coyuntura política y social (tam-bién valiéndose de esa como parte de la inspiración), para reínventarse y sobresalir.
• Y sí bien su vena artística y crítica no es nueva —grandes plumas y artistas son parte de su esencia—, su dinamismo de los últimos tiempos ha colaborado a que haya un movimiento fuerte y vísíble. 

Pablo Andino, reconocido artista visual ecuatoriano que ha enfocado su trabajo en la escultura, ha sido uno de los protagonistas guayaquileños de una escena que es latente: las galerías.

Para él, la Perla del Pacífico se convirtió en una potencia cultural del país, gracias al Instituto Tecnológico de Artes del Ecuador (ITAE), que luego sería articulado a la Universidad de las Artes, donde irónicamente, según el artista, perdió la fuerza. Y es que, en una mejor época, el ITAE fue el respon-sable de un riguroso proceso académico y práctico, con los mejores profesores que debían ser artistas activos; es decir, la experiencia se unía al aprendizaje. El talentoso artista Xavier Patrio fue el fundador y rector de este instituto. Debido a su visualización, fue posible un intercambio generacional a otro nivel, explica Andino. "Gracias a la formalidad y disciplina de este instituto, se logró la apertura de nuevas galerías que han marcado el ritmo de la ciudad. Asimismo, colectivos, como Arte Factoría o Las Brujas, han impregnado a Guayaquil con un halo cultural de excelencia, de visión amplia sobre lo que es el arte y con creaciones específicas, que han impulsado a los artistas de manera internacional".

Nomínimo (en Plaza Lagos Town), DPM Gallery (David Pérez Mac Collum en la Circunvalación Sur), Violenta (en el centro-sur), Galería de Arte Lalinchi (al noroeste), entre otros, son espacios que han marcado la escena con propuestas sólidas y frescas, que ofrecen al vísítante una experiencia completa y, muchas veces, estremecedora. Estos lugares acogen propuestas de artistas emergentes, que ya son parte del ADN de la escena índíspensable de Guayaquil. Pero, para Andino, esta efervescencia artística no es casual. La empresa privada ha tenido mucho que ver —tanto como la academia—, para que nuevas propuestas surjan con la calidad y la proyección necesarias, "El sector público tiene dinero, pero muchas veces viene con problemas por los fondos concursables; no hay seguimiento ní entendímíento del artista, no hay un sistema de difusión adecuado, lo que limita la producción de la obra. Desde lo privado, la autogestión —sí bien es extenuante— ha permitido libertad creativa, ser prolíficos y con resultados que hablan bien del artista y su obra. 

Hay que decir también que a la ciudad llegaron artistas ínternacíonales, que se volvieron referentes por sus ideas frescas. Entonces, surgió la necesidad del coleccionismo para refor-zar la escena„,", afirma Andino. Agrega que, a díferencía de lo que sucede en otras urbes, el guayaco tiene un excitement por lo que adquiere, por lucirlo, por tener cosas diferentes que agreguen valor; tiene una curíosídad por lo nuevo, "En Quito, siento que se han quedado con la tradícíón, con el Centro Histórico, mientras que hay nuevas formas y expresiones que necesitan explorarse y valorarse". Un recorrido por el nuevo Guayaquil es necesario, con una mirada abierta al arte y a la posíbílídad de sorprenderse por la cantidad y la calidad de su agenda cultural nutrida y pensada desde la libertad del arte hecho con excelencia.

GYE: ART & POP

La ciudad, por su clima cálido y su gente des-inhibida, invita a conocer nuevas propuestas a diario. Las ofertas gastronómicas son infinitas y de alto nivel para los sibaritas exigentes. Para quienes les atrae la movida cultural, las opciones son variadas y fundamentales para el desarrollo de sus gestores. 

AGENDA DE RUTA

Muégano Teatro: dirigido por Santiago Roldós, se consolidó como un referente en pedagogía y arte. Es un espacio interdisciplinario, con una mirada crítica y contemporánea (callejón Magallanes y Rocafuerte). 
Teatro Sánchez Aguilar: ubicado en Sambo-rondón, el teatro ha sido un hito para el crecimiento y la difusión del arte, desde una mirada más comercial, pero con una calidad indiscutible. Obras de teatro, musicales, eventos privados, se-minarios han encontrado allí el nido que alberga las artes. 
 

La Bota: en el Malecón del Salado, este centro cultural alberga al Microteatro de Jaime Tamariz y las Tablas Café Concert de Francisco Pinoargotti. Sin embargo, La Bota es una sala multiuso, que se adapta a las necesidades del artista, en varios horarios para todo público. 
 

Centro Cívico Eloy Alfar*: este espacio patri-monial brinda acogida a la Sinfónica de Guayaquil; está ubicado en el Parque Forestal. 
Fundación Teatro Centro de Arte León Febres Cordero: allí se dictan cursos y talleres permanentemente, además de presentar obras de arte, conciertos, foros, teatro, con los artistas más relevantes de la escena nacional e internacional. 
 

Estudio Paulsen: ubicado en el barrio Las Pe-inas, este centro desarrolla programas de estudio para actores y proyectos artísticos, en una de las zonas más bellas de Guayaquil.