Paradero El Chinito, Pallatanga

Este paradero es un restaurante de comida muy variada que ofrece a los viajeros platos de toda índole desde los desayunos, almuerzo, cena y para transportistas en la madrugada toda la sazón y abundancia que su trabajo lo requiere.

¿Qué debes Saber?

  • Este paradero con 15 años de experiencia brinda a sus clientes una amplia carta de platos, incluso dependiendo del horario en que lo visiten, lo que hace que no importa cuantas veces lo visites, siempre podrás probar algo nuevo y delicioso.
  • Para demostrar lo variada de la carta vamos a poner algunos ejemplos.
    • Desayunos bastante contundentes con arroz, pollo, carne, guatita, pescado, papas con cuero, más bebidas frías o calientes son una muestra de este amplio menú.
    • Almuerzos con menús que integran carne, pollo, mariscos, hornado, banderas, más los acompañantes como arroz, papas, fideos y ensaladas son el deleite de muchos.
    • Cenas a base de apanados, carne o pollo o chuleta a la plancha, tallarines con salsas de carne o pollo, chaulafán, arroz con pollo y más saciaran hasta el hambre más grande.
  • Paradero el Chinito atiende a su clientela todos los días y se encuentran ubicados en el cantón Pallatanga sobre la Panamericana Sur Km1 en la vía a Guayaquil. Para mejor ubicación están situados del lado derecho de la vía pasando el destacamento de policía.

Calidad en sus Platos y mucho Cariño son la razón de su vida

Galo Rodríguez, oriundo de Pallatanga, inicia su vida gastronómica a la edad de 24 años siendo empleado en la cocina de un restaurante.

Es allí donde le nace el gusto y a pesar de no haber recibido una educación formal, por cuenta propia y de manera empírica decide auto educarse y mejorar sus conocimientos hasta el punto de formar su propio local de comidas.

Trabajo duro y mucha dedicación en la mejora de sus platos ha hecho que Galo logre consolidar un restaurante que tiene un gran reconocimiento en la comunidad y en los viajeros que lo frecuentan.

Lo que les hace diferente acorde a sus palabras son la buena sazón que pone a cada uno de la vasta gama de platillos que preparan y por supuesto una magnífica atención para que cada comensal los recuerde y regrese. 

Su dueño nos cuenta también que todo esto no lo hubiese logrado sin el apoyo de su esposa y de sus empleados que a la fecha son ocho a los cuales los cuidad como si fuesen su familia.

Galo siente que ha aportado a su comunidad dando trabajo directo a sus empleados y por supuesto dando negocio a sus proveedores y personas que de alguna manera indirecta se involucran con el negocio. En pocas palabras Galo ve al Paradero El Chinito como el amor de su vida.

Nos cuenta también que es tal su reconocimiento que tiene un numero gigante de clientes fieles que regresan día a día, principalmente por el buen sabor de cada uno de sus platos y la personalización y cariño que dan a sus clientes.

Dan gustos tan individualizados que, sin importar el concepto del plato preparado, el cliente manda y decide como quiere componer su menú, por ejemplo, hay clientes que piden guatitas y solicitan se adiciones una presa de pollo para hacer más contundente al plato.

Otros piden quizás una menestra y quieren que se lo complemente con papas con cuero, es decir sobre el menú el cliente puede mezclar los platos sin restricción alguna, lo que hace que se sientan atendidos a gusto.

Finalmente, sus dueños nos invitan con toda la cordialidad y cariño que los caracteriza a cada visitante y auguran un buen día y un buen viaje y su pronto retorno.




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