Hostería Phusuloma Aphu, Chambo
¿Qué debes saber?
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La hostería se encuentra a solo 5 minutos de Chambo y a 15 minutos de Riobamba. Está situada a los pies de la Montaña Phusuloma en un entorno por demás natural, entre la vegetación propia de la zona.
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Cuenta con varios servicios que cambiarán tu manera de pensar y sanar ofrecidas por 4 expertos en temas ancestrales.
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La hostería ofrece hospedaje que incluye desayuno por usd 40.00 o si prefieres el camping que incluye fogata y juegos por usd 15.00 por persona.
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Los talleres de fin de semana cambiarán tu rutina, basados en la arte-terapia se los dictan previa reserva regularmente de 10am a 3pm e incluyen alimentación, por usd 50 por persona.
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Las terapias son únicas y diversas pasando por la armonización, la purificación, la alineación de chacras, tratamientos de belleza con productos propios de la zona y enriquecidos todos ellos con una cultura ancestral y dictadas en quichua que te cambiará tu modo de pensar.
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Los costos dependen de cada terapia e inician desde los usd 40.00.
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Las actividades son variadas e incluyen caminatas por la montaña, baños de bosque, juegos ancestrales, piscina, caballos y más.
Historia de Phusuloma Aphu
María Mercedes Fierro, médico ancestral de profesión al igual que sus 3 hermanos dan vida a este mágico lugar que incluyen servicios únicos y ubicados en un entorno natural, digno de visitar.
Esta propiedad fue adquirida por sus padres hace más de 60 años y es su madre de profesión sanadora quien inicia el proyecto de un lugar de sanación espiritual aprovechando los valores del entorno.
La Hostería Phusuloma está al pie de la montaña del mismo nombre y que acorde su origen indígena donde habitaba la nacionalidad Achamban, significa “Montaña Sabia", envejecida, que en su cumbre se divisa el “circulo sagrado” , es considerado como un observatorio astronómico natural.
Hospedaje en Phusuloma
Desde la entrada el establecimiento muestra su carácter diferente mostrando una edificación auto-sustentable con mucho de arte ancestral y religioso de la escuela quiteña.
Cada habitación dispone de murales replicados en temas religiosos que dan un toque muy original y adecuaciones propios de una hostería cómoda y práctica.
Si eres amante de la naturaleza también puedes aprovechar el hospedarte en el área de camping y disfrutar de una noche informal con juegos ancestrales, fogata, música.
Terapias Sanadoras
Todas las terapias están basadas en la armonización, la purificación, la alineación de chacras, tratamientos de belleza con productos propios de la zona, dictadas en quichua y son tratadas por los 4 hermanos quienes estudiaron medicina ancestral en la Universidad de Colta.
Lo que hace que cada terapia sea apropiada para cada necesidad de la manera más profesional, con base en “la pacha mama”,
Una de las más atractivas terapias es el famoso “Temascal” (usd 60) que es un ritual para rejuvenecer y adquirir fuerza, usado en culturas norteamericanas, mexicanas y pre hispánicas por medio de un tratamiento en un sauna tipo Iglú construido en ladrillos de adobe y calentados con piedras volcánicas más hiervas curativas y agua del río.
Otras actividades
Los talleres de fin de semana dictados como arte-terapia son variados y tienen por objetivo la sincronización entre las dos partes del cerebro, alimentando mucho el lado creativo, sensible de la persona.
Las caminatas por el bosque y los baños de bosque nos conectan con la naturaleza de una manera mística e irrepetible.
Todos los tratamientos de belleza usan productos propios de la zona y acorde a sus dueños muchos de ellos reemplazan medicinas convencionales que posiblemente no tienen los efectos que la sabiduría del bosque nos da.
Todo esto no sería completo sin una gastronomía propia de Phusuloma, ofrecida en un restaurante con platillos como las costillas de cerdo ahumadas y asadas en leña, truchas de sus piscinas o como disfrutar de tus comidas en la cafetería Taita Pedro.
¿Has escuchado de “las brujas de Chambo”?
Estas leyendas que más se acercan a las historias norteamericanas tienen su variante local en Chambo, y dice la tradición que los pobladores del sector ponen en las noches tijeras abiertas de punta hacia arriba para que cuando pase una bruja en su escoba, se corte, caiga y una vez muerta pueda ser identificada.
Algo de terror para culminar con esta reseña…
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