Tomás García, cacaotero del campo, El Gran Cacao Arriba

“Esta vida aquí en el campo es muy linda, pero dedicándose, porque aquí en el campo donde yo vivo, yo tengo 50 y pico de años dedicado aquí, y unos 22 años de trabajar aquí. Tengo 77, me siento bien, me siento feliz, porque aquí, gracias a Dios, no me faltan mis realitos, ni la comida tampoco, porque aquí en el campo, cuando usted amanece limpio, al poco rato le cae cualquier cosa, cualquier sucre al bolsillo”

“Los árboles son mis compañeros, porque yo de ellos vivo, ellos me dan la vida a mí, porque si no fuera por ellos, yo no tendría de donde sacar para mi alimentación, entonces como me voy a sentir mal con ellos, si yo pudiera dormir junto a ellos, lo haría, ese es el agradecimiento que tengo con ellos”

La relación de Tomas con su arboles es su mayor tesoro y él lo guarda en cada una de las pepas que cosecha, de seguro los catadores podrán encontrar en su sabor todo el aroma floral de Esmeraldas. El cuerpo de este cacao se lo da la tierra que apenas con 75 metros sobre el nivel del mar ya tiene su carácter, pero es sobre todo, el buen ánimo con el que Tomas entra a trabajar en su plantación lo que le da la característica propia de la denominación de origen

“Gracias mi arbolito, gracias por darme esta producción, sígueme dando más, tienes que empezar a cargar toditos estos nuditos. Yo te quiero, te adoro”.

“A mis plantaciones, a mi tierra yo la adoro mucho como que si fuera mi madre, a la santa tierra y a mis árboles les adoro yo, los acaricio como si fueran mis hijos, mi esposa, para que ellos se sientan alegres, porque ellos tienen alma y vida como nosotros, hablar es que no pueden. Ellos sienten si voy disgustado, mal genio, ellos se sienten tristes, porque ven que yo no ando bien”

“La fama mía como cacaotero no es porque saco grandes cantidades, lo mío es más pequeño, pero la gente se admira de la cantidad de cacao que produzco con tan pocos árboles”

Don Tomas es un hombre sabio que no necesita de muchas cosas, le basta una brocha y un serrucho para continuar con una tradición que le ha hecho merecedor de una gran fama entre los cacaoteros. Tomas García podría ser uno de los productores de cacao más prósperos del país ya que su finca cuenta con cerca de 450 árboles por hectárea y logra sacar  3 veces más cacao nacional fino de aroma que el resto de sus colegas.

El Cacao Arriba es el primer producto vegetal comestible que obtiene la Denominación de Origen en Ecuador.