Iglesia de Todos Santos

¿Qué debes saber?

• Hace ya 10 años comienza el proceso de restauración de Todos Santos, me cuenta la hermana (hna.) Elizabeth Ochoa, responsable este complejo patrimonial.
• En 2005 el convento de semiclaustro, en el que actualmente viven seis oblatas, sufrió un incencendio. “A raíz de este siniestro, la comunidad se da cuenta que la casa madre de Todosantos estaba en muy mal estado”, cuenta. Es así, que buscan financiamiento para su rescate, pero no llega a ser suficiente y en 2007 nuevamente acontece otro incendio; y esto es lo que impulsa a que el Municipio de Cuenca y entidades privadas financien la restauración.
• Desde el 2007 hasta enero de 2014 se realizó un largo trabajo, que logró develar  grandes secretos, los que conocerás en tu recorrido por Todosantos en Cuenca.
• “A raíz de este siniestro, la comunidad se da cuenta que la casa madre de Todosantos estaba en muy mal estado”

Culturas cañari, inca e hispana en Todos Santos

Cuando los restauradores de Todos Santos adecuaban la iglesia notaron que en su subsuelo había restos de indígenas de las culturas prehispánicas: cañari e inca. Se hallaron 33 osamentas de origen primario (que no se han movido de lugar donde fueron enterrados) y origen secundario (que posteriormente se movieron). Algunos estaban abrazados a ollas de barro que al parecer contenían objetos de valor que fueron saqueados.

En el recorrido, verás los cimientos del primer lugar de culto cristiano de la ciudad, que era una ermita más pequeña que la iglesia, y poco a poco se fue agrandando.

Asimismo, los restauradores lograron develar la pintura mural y tabular de inicios de 1900 realizada por las primeras fundadoras de la congregación y que fueron luego cubiertas por varias capas de pintura blanca. Estas obras de arte religioso revelan el carisma de las oblatas y otros elementos del Cristianismo.

Además, en Todosantos descansa en un altar “El Churrudito”, un Jesús con cabellos naturales encrespados, que fueron donados por una de las oblatas. Cada Domingo de Ramos, en Semana Santa, los fieles le celebran una fiesta y lo pasean por las calles de Cuenca. Incluso cuando la parroquia estuvo cerrada por años, los creyentes solicitaban al Churrudito, cuenta la hna. Elizabeth.

Más allá de la religión

Las Oblatas de los Corazones Santísimos de Jesús y María son las guardianas de Todos Santos. Ya quedan pocas, tan sólo 6 mujeres; pero entre ellas logran dirigir una escuela –la primera de Cuenca en ofrecer educación a niñas indígenas-, y todo el complejo que incluye: la iglesia, espacios para eventos sociales, un jardín agroecológico con árboles patrimoniales, una panadería artesanal y un restaurante con varios salones que parecen sacados de un cuento de hadas. Todo esto, para autogestionar la joya que es Todos Santos.

Se llevó mi especial atención el jardín agroecológico, de los pocos que quedan en el centro histórico de Cuenca. Aquí viven tres nogales y un cedro, declarados árboles patrimoniales que también tuvieron su proceso de restauración. Especialistas quitaron las partes podridas de estos árboles, para rellenarlos con una mezcla a base de cemento -sí, cemento- y ahora estos seres han recuperado su coquetería con frondosas ramas y frutos. Los frutas y hortalizas del jardín sirven para preparar la comida del restaurante y si tienes suerte te encontrarás con los colibríes que cada tarde llegan a picar las flores del jardín.

Si tienes suerte te encontrarás con los colibríes que cada tarde llegan a picar las flores del jardín.

Desde aquí puedes entrar a los 3 salones del restaurante Todosantos, ubicados en el subsuelo del convento. Todos tienen vista al jardín y al Tomebamba. El Salón del Huerto tiene capacidad para 70 u 80 personas y también guarda antiguos artículos de la cocina del semiclaustro. El Salón del Fogón sólo tiene 2 mesas y es donde antes funcionaba la cocina; pero el más llamativo tiene sólo una mesa: es el Salon de la Roca, que muchos usan para eventos románticos, como pedidas de mano y aniversarios.

Cuenca está llena de magia e historia, y el Complejo Patrimonial Todos Santos es el reflejo de esta ciudad. Entré buscando una iglesia vieja y recibí más de lo que esperé: vistas hermosas al Tomebamba, un pedazo de naturaleza resguardado en medio de la ciudad, salones cautivantes y riqueza gastronómica. Definitivamente un recorrido obligatorio en Cuenca.

Uno de los barrios más antiguos de Cuenca es el de Todos Santos, donde se edificó la primera iglesia de la ciudad originalmente conocida con el nombre de Capilla de San Marcos, en el lugar en el que anteriormente los indígenas tenían su centro ceremonial denominado Hermita del Usno (piedra sobresaliente en una colina). La Capilla de San Marcos se destinó para el uso ex - clusivo de los indígenas, y junto a ella se fundó la primera escuela para este sector de la población. Aquí se empezaron a asentar los primeros pobladores atraídos por los molinos de Núñez de Bonilla, cuyos vestigios se conservan el Museo de Sitio Manuel Agustín Landívar, un ex - cepcional lugar arqueológico en el que coexisten vestigios de la cultura cañari, inca, y española. La actual iglesia de Todos Santos, fue construida en 1850, por mandato del obispo Miguel León, consagrada a la veneración del Sagrado Corazón de Jesús, como nos recuerda la leyenda de su portada.